viernes, 21 de octubre de 2011

Sigo existiendo!

Acá estoy, aunque parezca que me fugué... Pero no! Sigo aquí, sólo que todavía adaptándonos mutuamente! En este momento escribo a una mano (diría a dos dedos, ya que la mecanografía no es mi fuerte) porque con la otra trato de entretener a Lolo, que lloriquea un poco porque "hay que hacer lo que a él le gusta", que en este momento sería que me pare y lo sacuda un poco... Bueno, me paré y lo sacudí un poco... Y volví, y ahora se quedó un ratito sentado solo, así que recuperé mis dos manos. Este chanchito que me hace tan feliz cumplió dos meses el lunes. Por suerte hace una semana que entendió que el período oscuro es la noche y el claro es el día y que en uno tratamos de dormir y el otro es para estar despiertos... Diría que los primeros 15 días fueron los más difíciles porque todavía estás bastante machucada de la cesárea y se duerme muuuuuy mal y muuuy poco. Después tuvimos este problemita del día y la noche. Entonces todos los que lo veían me decían: es un saaaaanto! Porque claro, de día dormía. Pero de noche... mamita!!! Había momentos desesperantes, les juro. La neonatóloga cuando cumplió un mes y le dije que no dormía de noche me dijo ah no, dejalo llorar, sino te va a tener así hasta el año si hasta ahora no aprendió. Pero yo no lo dejo llorar, me parece una crueldad. Y además si lo escucharan se darían cuenta de que es imposible dejarlo llorar... Además si la mamá es noctámbula, no lo vamos a criticar al chico por eso...Y solito fue aprendiendo. Le llevó unos días más... Igual cuando en medio de la noche me empezaba con sus sonrisas me lo morfaba. Solo que a las 11 de la mañana y sin dormir ya no me hacían gracia ni sus sonrisas... jeje. Fue más difícil mi relación de pareja que la del bebé, la verdad. Todavía está duro ese tema. Reclamos familiares, reproches, en fin, me hubiese gustado sentirme más cuidada, más protegida. Eso es lo que necesitamos las mujeres del marido cuando nace un bebé: paciencia, comprensión, contención y un poco de ayuda con el bebé para simplemente descansar un poco o bañarnos . Pero creo que los hombres por lo general tienen un seteo raro para ese momento. No logran comprender... Y eso que mi marido cocinaba, lavaba ropa y platos, cambiaba pañales. Pero yo no necesitaba eso, necesitaba otra cosa... Y creen que haciendo eso cumplen... En fin, iremos recuperando de a poco nuestro vínculo... Bueno volviendo al gordito, es lo más: lo más lindo, lo más gordo (pesa 6,200kg que para 2 meses es "bastante"), lo más sonriente y charlatán (me cuenta cosas interesantisimas como agoooo, aaaa, ehhhhh, aguuuuuu.) y también lo más llorón y protestón. Todo menos tranquilo... jeje. Bueno, es hermoso. Todavía lo miro y lloro... Por suerte todavía no se da cuenta, sino pensaría que estoy loca... Bueno, corto porque estoy a una mano y parada moviendome hacia arriba y abajo... Y no da... Gracias a las que estuvieron pendientes! Besos!